Una notificación en el móvil, el café de la mañana, saludar a tus compañeros o incluso distraerte buscando algo en internet… un millón de razones para perder la concentración. Sin embargo recuperarla puede ser igual de fácil si tienes las herramientas correctas de tu lado.

Te enseñamos algunos consejos para aumentar la productividad laboral, ¿estás listo/a para conocerlos?

5 consejos para mejorar la productividad

Levántate antes

Despertar media hora antes sería suficiente, ya que la idea de este ejercicio es tener un poco de tiempo para planear tu día, ordenar tus horarios y sobre todo para ser honesto/a con ellos. Esto hará que tu día tenga un orden y unos objetivos fáciles de seguir y cumplir. Incluso aprovechar para hacer una actividad ajena al trabajo, esto hará que empieces el día más relajado/a y que a la hora de llegar a trabajar tu concentración esté al 100%.

Ordena el espacio de trabajo

El orden llama al orden, así que anímate y empieza por organizar el espacio en el que trabajas. Puede parecer una tontería, pero un escritorio en el que sepas a la perfección donde encontrar todo te ahorrará más tiempo del que crees. Además, un área de trabajo agradable te hará concentrarte más, aumentará tus ganas de trabajar y te ayudará a sentirte mejor en tu lugar de trabajo.

Primero lo más difícil

Empezar con los proyectos más difíciles o más complicados hará elevar la productividad de tu empresa. Enfrentarte a lo difícil aportará toda tu concentración y empezarás el día resolviendo una tarea que de lo contrario probablemente habrías aplazado hasta el día siguiente. Coge fuerzas y enfréntate a esa tarea que se te hace más difícil, una vez lo logres, verás como el resto del día se te hace más fácil y más ameno.

Nada de horas extra

Comprométete con un horario fijo inmediatamente que te obliga a ser más cuidadoso con tu tiempo, a medirlo mejor y sobre todo a optimizarlo todo lo que puedas. Anímate y propón organizar tu día y el de tu equipo para lograr cumplirlo todo en los horarios establecidos.

Aprender también a decir no

Esta es quizás una de las lecciones más importantes que debes aprender en el mundo laboral. Y es que aunque es importante ser un buen miembro del equipo y ayudar cuando puedas a tus compañeros, saber cuándo no puedes hacerlo y aprender a no sobrecargarte,  es igual de importante.